El alcohol es uno de los factores de riesgo más comunes en los accidentes de tráfico. Las cifras hablan por sí solas, ya que el alcohol está presente entre el 30% y el 50% de los accidentes mortales en España.
El año pasado, el 48,7% de los conductores fallecidos en las carreteras de nuestro país dieron positivo en alcohol, drogas o psicofármacos, según el Informe 2020 del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Jurídicas de España, que confirma que existe un problema . que desde un punto de vista histórico ha sido muy difícil de resolver.
Existe la falsa creencia de que los conductores de bicicletas y vehículos de movilidad personal, como los patinetes eléctricos, no están obligados a realizar las pruebas de alcoholemia. Pero no es así. Las normas generales de circulación son inquebrantables al respecto.
En concreto, el artículo 21 establece que “todos los conductores de vehículos y bicicletas estarán obligados a someterse a las pruebas establecidas para la detección de una posible intoxicación alcohólica”.