Con la política española convulsa por la huelga de transportes y las críticas prácticamente unánimes al cambio de postura del Gobierno sobre el Sáhara, el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, viaja a Bruselas.
El presidente del Gobierno español entró en la reunión con el firme propósito de defender medidas concretas para mejorar las interconexiones energéticas de la Península Ibérica con el resto de Europa. Sánchez ha señalado que están por debajo del 3%, cuando deberían estar más avanzadas, según el acuerdo alcanzado hace unos años en la Unión Europea.
En este caso, La Unión Europea y Estados Unidos han llegado esta tarde a un acuerdo para comprar más gas licuado, que llegará al continente a través de grandes buques metaneros, al menos durante los próximos dos años. De esta forma, la UE reduce su dependencia del gas ruso.
El presidente estadounidense, Joe Biden, dijo este jueves que la escasez de alimentos “será real” y que ese es uno de los temas que discutió hoy con sus interlocutores en Bruselas.
“El precio de las sanciones no será solo para Rusia, sino para muchos países, incluidos los países europeos y nuestro país”, dijo Biden en una conferencia de prensa.
Más presión para Rusia
Unión Europea y Estados Unidos busca aumentar la presión sobre el presidente ruso, Vladimir Putin, cerrando filas con cumbres a nivel de líderes de la OTAN, el G7 y el Consejo Europeo, en un frente sin precedentes ante la invasión rusa a Ucrania.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y algunos de sus aliados de la OTAN han instado a China a “pedir un fin pacífico del conflicto” en Ucrania durante la cumbre de la Alianza sobre la invasión rusa del territorio ucraniano.
Un mes después del inicio de la ofensiva rusa, el presidente estadounidense Joe Biden, viaja a Europa.
Cumbre extraordinaria de la OTAN
La agenda es una cumbre extraordinaria de la Alianza Atlántica que se completará con uno de los líderes del G7 y el Consejo Europeo, una oportunidad para el conjunto de la UE de discutir con Biden la evolución de la guerra en Ucrania.
La reunión de la OTAN comenzó con un intercambio de puntos de vista por videoconferencia con el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ya ha dicho que la Alianza está preparada para proteger a todos sus aliados en caso de un posible ataque químico o nuclear ruso y duplicará la ayuda a Kiev, ofreciendo “Equipo” para hacer frente a una amenaza rusa “química, biológica, radiológica o nuclear”.
El presidente estadounidense, Joe Biden, advirtió este jueves que su gobierno sería “responsable” si Rusia usa armas químicas en Ucrania y aseguró que las represalias dependerán de la “naturaleza del uso” de ese tipo de armas. de Moscú
Los aliados dieron luz verde al establecimiento cuatro nuevos batallones internacionales en Rumania, Hungría, Eslovaquia y Rumaniaademás de los ya realizados en 2017 en los tres países bálticos y Polonia.
Estados Unidos y sus aliados estudian la posibilidad de dotar a Ucrania de sistemas de defensa aérea para la invasión rusa.
Cumbre del G7
Una vez finalizada la cita de la OTAN, es el turno de los líderes del G7, incluido el primer ministro japonés, Fumio Kishida. Sobre la mesa, coordinando la respuesta política del Kremlin. El G7 ha acordado un nuevo paquete de sanciones contra Rusia por invadir Ucrania.
Además, el presidente de EE. UU., Joe Biden, ha argumentado que Rusia debería ser excluida del G20 por su invasión de Ucrania.
Tanto a nivel de la OTAN como del Consejo Europeo, ha habido tiempo para analizar el papel de China en la crisis de Ucrania. El presidente estadounidense, Joe Biden, le ha dicho a su homólogo chino, Xi Jinping, que “pondrá en peligro” sus lazos con Occidente, especialmente con Estados Unidos y la Unión Europea (UE), si ayuda a Rusia en Ucrania.